Descripción
La col kale ha sido una de las últimas variedades en incorporarse a la gama de germinados Brot d’Or. Dado el interés de nuestros clientes por alimentos de gran calidad nutricional, ha sido uno de los que han ganado más adeptos.
Contenido: 70 gramos
Contenedor tarrina biodegradable / compostable.
Nota: Disponibilidad por servicio de paqueteria normal solo en los meses de invierno.
Beneficios
La kale se ha ganado el apelativo de “súper-alimento” por varias razones. Su germinado posee calcio en altas proporciones, por lo que es un buen aliado del sistema óseo.
Lo mismo sucede con el hierro, tan beneficioso para combatir la anemia.
Por su parte, el magnesio contribuye a mejorar el funcionamiento del sistema digestivo y combate el cansancio muscular.
Pero probablemente sean sus propiedades antioxidantes las que lo han hecho más popular. Los glucosilonatos, nitrilos, carotenoide y flavonoides son las sustancias relacionadas con la prevención de la formación de células cancerígenas.
Las vitaminas A y C actúan como elementos inmunitarios y combaten el envejecimiento celular.
La vitamina K, además de ayudar a fijar el calcio, favorece la coagulación de la sangre, lo que lo convierte en un complemento alimenticio perfecto para aquellos que han salido de una operación quirúrgica.
Destaca su riqueza en fibra y en proteínas, así como su baja aportación energética. Es por ello que resulta un alimento muy aconsejable para saciar el organismo en dietas para bajar peso.
Consejos
Podemos darle un tratamiento similar al del resto de coles. Añadirlo a nuestros guisos, mezclarlo con un puré de patatas, o una ensalada de pasta pueden ser muy buenas opciones, aunque en crudo es como más rendimiento nutricional le sacaremos.
Podemos incluirla en todo tipo de ensaladas y como acompañamiento de platos, tanto de carne como de pescado.
Ingredientes
Semillas de kale de cultivo ecológico.
Envase
El origen de los contenedores de Brot d’Or está en las plantas. El maíz y la patata, entre otras verduras, transforman el dióxido de carbono y el agua en azúcares. Lo hacen a través de las hojas y raíces con el impulso de la energía solar. El almidón obtenido de estos cultivos es la materia prima. Con la ayuda de microorganismos, se somete a un proceso de fermentación. El resultado es el granulado plástico ecológico y no contaminante, con el que se fabrican nuestros envases. Estas terrinas son biodegradables, de manera que, depositándolas en el contenedor de los residuos orgánicos, terminan transformándose en compost en un plazo de entre 8 y 12 semanas. El producto resultante se vuelve a incorporar en el ciclo como fertilizante para las plantas.